En intensos 12 días, Rafael Cavada y Anwar Farrán recorrieron Jericó, la basílica de la Natividad, Beit Jala, Ramallah, Hebrón y el barrio de Mea Shearim, entre otros. Pero, fue este último el lugar que más los conmocionó.
Anwar Farrán y Rafael Cavada venían fraguando este periplo desde hacía un par de años, el que tomó fuerza en los últimos seis meses. Finalmente, en noviembre del año pasado lograron viajar. Ambos hicieron uso de sus vacaciones. Cavada logró "negociar" con Radio Sonar unos días extras para cumplir con esta travesía. La dupla se conoce desde hace muchos años, pero fue en Mega cuando estrecharon más sus lazos de amistad. Era la época en que ambos compartían escritorio y mientras el resto comentaba las noticias de la noche anterior, ellos conversaban acerca del conflicto en Medio Oriente.


Este reportaje documental mostrará ante Chile y el mundo cómo es la ocupación israelí. El título tentativo por ahora es 'País ocupado'. "En este viaje nos ayudó mucho la comunidad y la televisión palestina. Nosotros consideramos que el tema palestino se toca poco en los medios de comunicación, es un tema que no goza de mucha cobertura, y fue así como se comenzó a preparar este proyecto", dice Farrán. Para Cavada, "el título de nuestro reportaje es algo así como 'Bajo ocupación'. Ese es el foco porque además es lo que se permea de lo que allá se vive. ¡Es vivir bajo ocupación! Es súper omnipresente la sensación de estar en un país ocupado".

La realidad de Hebrón
Una de las situaciones más fuertes las sufrió el equipo al interior de Hebrón, conocida como la "ciudad fantasma", a la cual accedieron guiados por un miembro de la organización Breaking the Silence. "Hebrón tiene 850 colonos judíos que son vigilados por 650 militares, una proporción de casi uno a uno. Ellos han formado una suerte de ghetto en el centro histórico de la ciudad, imposibilitando el acceso de palestinos a la zona del mercado y sus calles de alrededor. Hasta allá nos llevó un miembro de Breaking the Silence, organismo israelí que no se declara pacifista. Dicen que su país tiene derecho a defenderse, pero denuncian que la ocupación de los colonos es una práctica inviable, porque además les requiere a los judíos muchos recursos al Estado de Israel que los obliga a hacer cosas que el poder político manda", dice Cavada.
Y relata: "Los miembros de esta organización nos contaron que su primera misión fue un mapping, práctica militar consistente en entrar a una casa a las 2 de la madrugada para interrogar a su gente, sacarlos de sus camas, reunirlos en el living, las mujeres con sus niños en los brazos y ellos -al frente- armados. Y nos confirmaron que el único objetivo del mapping era 'hacerles sentir que nosotros éramos dueños de su vida'. Al recordar las caras de esos niños palestinos, estaban ciertos que los pequeños nunca en su vida iban a sentir amor por Israel".
Cavada califica la situación como ?brutal?. ?Hay casas con sus puertas tapiadas, donde los palestinos no pueden entrar. La ocupan los colonos y luego los judíos las reclaman para sí.
Después piden "una zona de seguridad" y así se van extendiendo en el territorio. Afuera de ese ghetto, hay 280.000 palestinos. Más de 1.200 tiendas han cerrado, siendo éste el único lugar donde la pobreza ha aumentado por dicha ocupación.
Allí mismo fue donde un colono judío los interrogó con su celular, los increpó e insultó al miembro de Breaking the Silence, enrostrándole que era un "traidor pagado por la Unión Europea". "Se metió en la grabación, estando armado como casi todos los colonos en la zona. Fue el mismo tipo que le tiró un cuchillo a un joven palestino para inculparlo, cuando fue abatido por la fuerza israelí. Ese personaje se pasea libremente en Hebrón, tiene prohibido manejar, pero anda en una cuatrimoto que, para todos los efectos, es lo mismo que andar en un auto", relata Cavada.
Para Farrán fue un momento en que se sintieron totalmente indefensos. "Los soldados protegían al colono. Alguien pudo haber disparado y nosotros haber recibido algún proyectil. Quién va a hacer algo por ti si están pendientes de la seguridad de los colonos y no de nosotros que estábamos grabando un reportaje junto a gente de la comunidad palestina", puntualiza.

Hitos claves del viaje
Este documental -aseguran sus autores- no busca atacar sino mostrar la realidad que se vive en Palestina tras tantos años de ocupación. En opinión de Farrán, cuesta comprender la dicotomía de un Estado encima de otro. Cavada, en tanto, deja en claro: "No soy una persona que tenga una visión negativa del mundo judío. Lo que tengo es una visión negativa de las políticas del gobierno de Israel". Consideraron chocante y aberrante la construcción del Muro que divide a palestinos de israelíes. "Lo han levantado en las narices de las personas, imposibilitando la paz entre los dos Estados. Palestina ha perdido el 78% de su tierra histórica y tampoco su gente puede vivir tranquila en el 22% restante".
Cavada reflexiona: "Christiane Amanpour, de CNN, dijo una vez que 'objetividad es interrogar a ambas partes'. Aquí la objetividad no tiene nada que ver con tratar de igual manera a la víctima que al victimario y esa es una cosa que tiende a olvidarse. El Muro fue declarado ilegal por la Corte Internacional de Justicia. Es una sensación de opresión constante. Es decir: 'yo hago lo que se me antoja según mis criterios de seguridad'. Y como hemos visto, son bastantes elásticos. Si ocupa una casa el criterio de seguridad, se amplía a otras que están alrededor. Y yo me pregunto: ¿Eso en dónde rima con justicia??.
Para ambos, la única deuda pendiente es no haber grabado en Gaza. Pero, esperan lograr los permisos necesarios para volver y entrar a la zona

Fuentes:
  • Al Damir y Federación Palestina de Chile
Federación Palestina de Chile - Al Damir