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| Alexander Schetinin |
Moscú, 14 abr (PL) Rusia reiteró hoy su llamado a un diálogo entre las formaciones políticas en Venezuela, dentro de la Constitución y las legislaciones vigentes, así como a evitar una injerencia foránea para estimular la desestabilización.
La regulación de las diferencias que existen entre las fuerzas políticas en un país amigo para nosotros como Venezuela debe basarse en tres postulados, declaró a Prensa Latina el jefe del Departamento de América Latina de la cancillería rusa, Alexander Schetinin.
Todas las decisiones para resolver el diferendo deben tomar en cuenta la Constitución y la legislación vigente, el respeto al estado de derecho y los actos legales que fueron aprobados por los órganos legítimos de ese país, consideró.
En segundo lugar, creemos que las diferencias de las fuerzas políticas deben superarse en la mesa de negociaciones, mediante un amplio diálogo nacional, acotó el diplomático.
Lo más importante en ese diálogo deben ser las tareas para el desarrollo ulterior y funcionamiento normal del gobierno venezolano, la solución de tareas sociales y del desarrollo económico, estimó.
Hablamos aquí de lo que debe unir a las fuerzas políticas porque más allá de sus contradicciones, todos son venezolanos y el desarrollo del país debe estar por encima de todo, incluidas las diferencias políticas, consideró Schetinin.
El tercer postulado es que los problemas de los venezolanos los deben resolver ellos mismos, afirmó.
Si ellos necesitarán un apoyo o cooperación internacional para que todas las fuerzas políticas vayan a la mesa de negociaciones, entonces si sería factible, en un formato que convenga a esas formaciones en Venezuela, opinó el funcionario.
Cualquier acción destructiva, y mucho menos, el estímulo a una injerencia por la fuerza de otros países en los asuntos internos de Venezuela son totalmente inaceptables, pues a lo único que llevará será a convertir a ese país en un serio foco de tensión, acotó.
Ello tendría una connotación negativa tanto interna como para naciones vecinas y toda la región latinoamericana y creo que nadie está interesado en eso, observó.
Por ello la cooperación internacional debe dirigirse a buscar un diálogo, un entendimiento mutuo y no, precisamente, a estimular la desestabilización, a provocar el naufragio de la nave, donde navegan todos los venezolanos, concluyó el diplomático ruso.
oda/to
Todas las decisiones para resolver el diferendo deben tomar en cuenta la Constitución y la legislación vigente, el respeto al estado de derecho y los actos legales que fueron aprobados por los órganos legítimos de ese país, consideró.
En segundo lugar, creemos que las diferencias de las fuerzas políticas deben superarse en la mesa de negociaciones, mediante un amplio diálogo nacional, acotó el diplomático.
Lo más importante en ese diálogo deben ser las tareas para el desarrollo ulterior y funcionamiento normal del gobierno venezolano, la solución de tareas sociales y del desarrollo económico, estimó.
Hablamos aquí de lo que debe unir a las fuerzas políticas porque más allá de sus contradicciones, todos son venezolanos y el desarrollo del país debe estar por encima de todo, incluidas las diferencias políticas, consideró Schetinin.
El tercer postulado es que los problemas de los venezolanos los deben resolver ellos mismos, afirmó.
Si ellos necesitarán un apoyo o cooperación internacional para que todas las fuerzas políticas vayan a la mesa de negociaciones, entonces si sería factible, en un formato que convenga a esas formaciones en Venezuela, opinó el funcionario.
Cualquier acción destructiva, y mucho menos, el estímulo a una injerencia por la fuerza de otros países en los asuntos internos de Venezuela son totalmente inaceptables, pues a lo único que llevará será a convertir a ese país en un serio foco de tensión, acotó.
Ello tendría una connotación negativa tanto interna como para naciones vecinas y toda la región latinoamericana y creo que nadie está interesado en eso, observó.
Por ello la cooperación internacional debe dirigirse a buscar un diálogo, un entendimiento mutuo y no, precisamente, a estimular la desestabilización, a provocar el naufragio de la nave, donde navegan todos los venezolanos, concluyó el diplomático ruso.
oda/to
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