Por Fausto Triana
Santiago de Chile, 8 jun (PL) Chile abrió puertas gigantes de la fibra óptica hacia el océano Pacífico, con acento en China, en una perspectiva de mediano y largo plazo que afincan al país austral como potencia latinoamericana de telecomunicaciones.
Santiago de Chile, 8 jun (PL) Chile abrió puertas gigantes de la fibra óptica hacia el océano Pacífico, con acento en China, en una perspectiva de mediano y largo plazo que afincan al país austral como potencia latinoamericana de telecomunicaciones.
Con un horizonte más lejano, en proceso de prefactibilidad, el Cable Transpacífico Asia-Latinoamérica cuenta de todas formas con un memorando de intenciones alcanzado entre China y Chile en noviembre de 2016.
El principio de convenio fue ratificado en la reciente visita de la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, a Beijing, y es una de las puntas de lanza dentro de la filosofía de la Conferencia La Franja y la Ruta del gigante asiático.
Marcelo Flores, gerente de Fomento y Desarrollo del ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, señaló que existen tres alternativas, la primera de Shanghai pasando por Sydney, Australia, Auckland-Nueva Zelanda y Valparaíso-Isla de Pascua y archipiélago Juan Fernández, en Chile.
La segunda, China, Tahití, Francia, y los mismos sitios anteriores chilenos; y la tercera Shanghai, Auckland y Punta Arenas, Chile.
En opinión del subsecretario (viceministro) de Telecomunicaciones, Rodrigo Ramírez, 'Chile pudiera estar camino a crear el mayor hub de conectividad de América Latina y el Caribe'.
Al margen, la nación sudamericana labora en la fase final de licitaciones para emprender a más tardar en enero de 2018 el cable de fibra en la Patagonia de tres mil 953 kilómetros de longitud.
La obra debe terminarse en el curso de 26 meses, para lo cual el estado aporta 100 millones de dólares como base.
'Es un programa muy relevante para el Gobierno de la presidenta Bachelet, del cual se venía hablando hace 10 años y ahora lo ponemos en marcha', apuntó.
Ramírez abundó sobre la iniciativa al resaltar que dará una completa integración digital del norte al sur chileno, 'con un proyecto atractivo para la industria y que cumple con la expectativa de las necesidades nacionales'.
La Fibra Óptica Austral abarcará desde Puerto Montt hasta Puerto Williams con una capacidad de seis terabytes.
Contará con 60 canales ópticos, un troncal submarino y tres troncales terrestres en las regiones de Aysén, Los Lagos y Magallanes y la Antártica chilena, con la esperanza de comenzar las obras en enero de 2018.
A una pregunta de Prensa Latina, el funcionario explicó que compañías de Corea del Sur, Japón, China, Francia, Alemania y Estados Unidos, además de varias nacionales, han mostrado interés por asociarse al programa.
'Los mayores beneficiados serán los científicos, en especial el polo de la Antártida. La Fibra Óptica Austral será esencial para el Centro Subantártico Cabo de Hornos en Puerto Williams y el Centro Antártico Internacional de Punta Arenas', detalló.
jcm/ft
El principio de convenio fue ratificado en la reciente visita de la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, a Beijing, y es una de las puntas de lanza dentro de la filosofía de la Conferencia La Franja y la Ruta del gigante asiático.
Marcelo Flores, gerente de Fomento y Desarrollo del ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, señaló que existen tres alternativas, la primera de Shanghai pasando por Sydney, Australia, Auckland-Nueva Zelanda y Valparaíso-Isla de Pascua y archipiélago Juan Fernández, en Chile.
La segunda, China, Tahití, Francia, y los mismos sitios anteriores chilenos; y la tercera Shanghai, Auckland y Punta Arenas, Chile.
En opinión del subsecretario (viceministro) de Telecomunicaciones, Rodrigo Ramírez, 'Chile pudiera estar camino a crear el mayor hub de conectividad de América Latina y el Caribe'.
Al margen, la nación sudamericana labora en la fase final de licitaciones para emprender a más tardar en enero de 2018 el cable de fibra en la Patagonia de tres mil 953 kilómetros de longitud.
La obra debe terminarse en el curso de 26 meses, para lo cual el estado aporta 100 millones de dólares como base.
'Es un programa muy relevante para el Gobierno de la presidenta Bachelet, del cual se venía hablando hace 10 años y ahora lo ponemos en marcha', apuntó.
Ramírez abundó sobre la iniciativa al resaltar que dará una completa integración digital del norte al sur chileno, 'con un proyecto atractivo para la industria y que cumple con la expectativa de las necesidades nacionales'.
La Fibra Óptica Austral abarcará desde Puerto Montt hasta Puerto Williams con una capacidad de seis terabytes.
Contará con 60 canales ópticos, un troncal submarino y tres troncales terrestres en las regiones de Aysén, Los Lagos y Magallanes y la Antártica chilena, con la esperanza de comenzar las obras en enero de 2018.
A una pregunta de Prensa Latina, el funcionario explicó que compañías de Corea del Sur, Japón, China, Francia, Alemania y Estados Unidos, además de varias nacionales, han mostrado interés por asociarse al programa.
'Los mayores beneficiados serán los científicos, en especial el polo de la Antártida. La Fibra Óptica Austral será esencial para el Centro Subantártico Cabo de Hornos en Puerto Williams y el Centro Antártico Internacional de Punta Arenas', detalló.
jcm/ft
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