The New York Times | Las cartas entre Jackie Kennedy y el hombre con el que no se casó | Por STEVEN ERLANGER 12 febrero 2017


Jacqueline Kennedy de visita en los templos de Angkor Wat en Camboya con David Ormsby Gore, de gafas oscuras, en 1967. Le propuso matrimonio meses después; ella le dijo que no. La carta que le escribió detallando por qué pronto será subastada. CreditRolls Press/Popperfoto, via Getty Images

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LONDRES — En noviembre de 1967, cuatro años después del asesinato de su esposo, Jaqueline Kennedy viajó a los templos de Angkor Wat en Camboya con David Ormsby Gore, un amigo que también había enviudado recientemente.
Se especuló mucho acerca de su posible relación amorosa. Algunos meses después, Ormsby Gore, un exembajador del Reino Unido en Washington, le propuso matrimonio. Ella lo rechazó.
En una carta escrita a mano, llena de angustia y un toque de crueldad, le explicó su decisión de casarse con Aristóteles Onassis.
“Si alguna vez puedo encontrar algo de alivio y consuelo… debe ser con alguien que no sea parte de mi mundo ni del dolor del pasado”, escribió. “Ahora puedo encontrarlo… si el mundo nos deja”.
La carta fue parte de una serie de papeles que se encontraron en cajas de piel roja cerradas con llave, las cuales se descubrieron apenas el mes pasado en Wales, dentro de la casa de Ormsby Gore, quien murió en 1985. Su nieto las subastará en Londres el próximo mes para restaurar la casa.
Las cartas demuestran los profundos sentimientos que había detrás de la máscara pública de una de las mujeres más célebres de su época.
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Matthew Haley, el director de libros finos y manuscritos en Bonhams, con cajas que contienen la correspondencia entre Jackie Kennedy y David Ormsby Gore. CreditAndrew Testa para The New York Times
Entre ellas se encuentra la carta dirigida a Ormsby Gore, también conocido como lord Harlech, con fecha del 13 de noviembre de 1968, un mes después de su matrimonio con Onassis y cinco meses después del asesinato de Robert F. Kennedy.
En ella, Kennedy habló del amor y del vínculo que sentía por Ormsby Gore, cuya esposa había muerto en un choque automovilístico en mayo de 1967. “Hemos compartido y perdido tantas cosas juntos. Aunque ahora nada es como quisieras, espero que ese vínculo de amor y dolor jamás se rompa”.
Escribiendo desde el yate de Onassis en Grecia, sobre hojas que llevaban el escudo de la embarcación (un mensaje claro y frío), Kennedy le dijo a Ormsby Gore: “Eres como mi querido hermano y mentor, así como el único espíritu auténtico que conozco… también lo fuiste para Jack”.
Ormsby Gore había expresado su incredulidad de que hubiera elegido casarse con Onassis y ella intentó responderle.
“Por favor —tú más que nadie debes saberlo—, nadie puede conocer los motivos de alguien más”, escribió. “Tú me conoces y debes saber que el hombre del que escribes en tu carta no es un hombre con el que yo podría casarme”.
“Onassis”, escribió, “está solo y quiere protegerme de la soledad. Es sabio y amable. Solo yo puedo decidir si puede hacerlo, y ya lo decidí”.
“Sé que es una sorpresa para muchas personas”, continuó. “Pero ellos quieren cosas para mí que yo jamás quise en mi vida”.
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Una carta de Jacqueline Kennedy a David Ormsby Gore en la que le explica su decisión de casarse con Aristóteles Onassis y no con él CreditAndrew Testa para The New York Times
Ormsby Gore era un viejo amigo de John F. Kennedy, cuya hermana menor, Kathleen, o Kick, se casó con el primo hermano de Gore. Después de la elección del joven presidente en 1960, el primer ministro Harold Macmillan envió a Ormsby Gore a Washington como embajador del Reino Unido.
Ambos hombres eran muy cercanos y el presidente Kennedy lo consultaba sobre cada asunto clave en materia de política internacional, sobre todo durante la crisis de misiles cubanos en 1962, así como para las discusiones sobre Vietnam y el desarme nuclear.
Robert Kennedy dijo que Ormsby Gore era “casi una parte del gobierno”, y agregó que el presidente “preferiría contar con su opinión que la de cualquier otra persona”.
Entre las cartas se encuentra una en la que el presidente Kennedy alabó al embajador: “Como ya lo sabes, en todos estos asuntos críticos, valoro tu opinión… que ha sido constantemente buena y acertada”.
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De izquierda a derecha: el primer ministro Harold Macmillan del Reino Unido; el presidente John F. Kenned, y Ormsby Gore, en la Casa Blanca en 1962. El presidente consultaba a Ormsby Gore sobre política internacional. CreditWilliam J. Smith/Associated Press
En total, hay 18 cartas escritas a mano y una escrita en máquina por parte de Kennedy para Ormsby Gore, así como otros documentos. Estos incluyen un pase de admisión a la Casa Blanca del 23 de noviembre de 1963, un día después del asesinato; una divertida carta de 1963 por parte de Robert Kennedy, firmada como “Bobby”, e instrucciones para cargar el féretro en el funeral de Robert Kennedy.
Entre los documentos también se encuentra una carta que Jacqueline Kennedy le escribió a Ormsby Gore después de la muerte de su esposa, Sylvia, conocida como Sissie, la cual parecía presagiar su deseo de casarse con ella.
“Tú última carta fue un llamado apasionado de soledad… haría lo que fuera para sacarte de ese sufrimiento”, escribió ella. “Quieres sanar las heridas y encontrar las piezas perdidas… pero no puedes porque tu vida no resultará de ese modo”.
Uno de los documentos más conmovedores es un borrador que Ormsby Gore le escribió a Jackie Kennedy después de que ella lo rechazó.
“Todos los planes patéticos que tenía de visitar Cirenaica, vacaciones juntos y toda una variedad de soluciones para el problema de nuestro matrimonio, incluyendo una de casarnos en secreto este verano —planes que creí que discutiríamos ansiosamente, con calma y con total honestidad, como lo hicimos en el Cabo y en Camboya, durante los siguientes diez maravillosos días— todo se había convertido en basura irrelevante tan solo unas horas después de mi aterrizaje en Nueva York”, escribió.
“Lloro cuando veo tu retrato. ¿Por qué tienen que pasar cosas tan dolorosas? ¿Qué necesidad hay de sufrirlas?”.
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Una carta de Ormsby Gore a Kennedy después de que ella rechazó su propuesta de matrimonio. “¿Por qué tienen que pasar cosas tan dolorosas?”. CreditAndrew Testa for The New York Times
Los Kennedy y los Ormsby Gore socializaban frecuentemente, a veces incluso provocaban resentimiento entre otros diplomáticos y miembros de la administración. Solían disfrutar cenas íntimas en la Casa Blanca y vacaciones compartidas.
Matthew Haley, director de libros finos y manuscritos en Bonhams, dijo que “no se había visto este nivel de introspección en la vida personal de Jackie, como tampoco ese nivel de intimidad”.
Ormsby Gore fue el gran amigo de su esposo, pero “el hecho de que establecieran una amistad tan íntima en tan poco tiempo es relevante”, dijo, aunque la hayan establecido a partir de la tristeza compartida.
El viernes, después de contactarlo para hablar sobre las cartas, un representante de la familia Kennedy dijo que habían decidido no hacer comentarios.
Barbara Leaming, quien ha escrito biografías del presidente y Kennedy, dijo que Ormsby Gore fue “la relación fundamental que Jack tuvo en la presidencia”, un hombre en el que confiaba casi tanto como en Robert Kennedy. “Jackie amaba en Jack al hombre que deseaba ser, y David era el hombre que lo ayudaba, según ella, a ser el hombre que Jack quería ser”, dijo.
El sufrimiento que vino después del asesinato de Robert Kennedy en junio de 1968 fue una de las razones por las que ella recurrió a la seguridad de Onassis, dijo Leaming. “Fue el segundo gran trauma para ella”, comentó Leaming. “Ella sabía muy bien que no era un matrimonio de amor, como se lo dijo a Joe Alsop en una carta. Lo que buscaba era seguridad”.
En cuanto a Ormsby Gore, “desde luego que se enamoró… ella lo entendía muy bien”, dijo Leaming. “Pero no tengo idea si lo consumaron o no”.
Ormsby Gore se casó de nuevo en diciembre de 1969 con Pamela Colin, una estadounidense que se parecía mucho a Jacqueline. Él murió en 1985, a los 66 años, después de un choque automovilístico. Jaqueline Onassis asistió a su funeral.